viernes, enero 03, 2014

TODO ESTO QUE VES AQUI ANTES ERAN CAMPOS

Hijo mío...todo esto que ves aquí son campos, bueno, ahora son campos de golf, algún día hubiesen sido tuyos,  pero verás, tu madre y yo se lo vendimos a un morito, un tal jeque Mohammed bin Rashid Al Maktoum y nos hemos pillado un apartamento en Torrevieja para disfrutar de la poca jubilación que nos ha dejado el cabronazo de Rajoy....







Aix.....Hoy en día, no es raro ver a veinteañeros mirando atrás y quejándose amargamente de que, cuando ellos eran pequeños, se vivía mejor....!CONCRETAMENTE SE VIVIA MEJOR POR QUE SE VIVIA DE LOS PADRES!

Jovenes quejándose porque antes la vida sí que era bella! incluso los dibujos animados eran mejores; la música sí que era buena! y los cromos! Los cromos que regalaban con los Bollycaos, los Mi merienda, Bony, Tigretón y Panteras Rosas...esos cromos si eran la ostia!. 
El mundo para ellos es ahora un valle de lágrimas. Algunos lo llaman nostalgia. Para otros es directamente ser GILIPOLLAS





Escena porno-pedófila de un aníme de los 90 





Los padres ya no son lo que eran, ahora en lugar de darnos “la paga" para poder independizarnos....se independizan ellos!!! Malditos separatistas! Si los míos incluso tienen una senyera con la estelada en el comedor! Mala espina me dan a mi éstos!!!







Pero es que no se dan cuenta de a la jungla de peligros domésticos que nos exponen? Un sacrificio de tareas domésticas al que ni un valiente como Ángel Cristo podría hacer frente sóbrio?

Que el otro día monté una fiesta en casa para celebrar que mis padres son por fin un estado independiente gobernado por mi madre “Mamá Más" (porque siempre te hace repetir la comida al son de “Quieres más, quieres más?) y la lié tan parda como en Historias del Kronen





















Y es mis padres, Tanto enseñarme las capitales de Europa y no me informan de que el Baileys y la Coca-cola pueden formar una bola de porexpán en el esófago o que bañarse teniendo la regla causa la muerte instantánea»...y luego van de responsables apuntándose a sectas de la tercera edad que durante los viajes del imserso a Teruel, donde se ponen finos de Jamón de bellota y vinos de Borja, se ponen a debatir de si a las series televisivas de adolescentes, e incluso algunas infantiles, promueven el alcohol, el sexo y las drogas: «Por no hablar de 
las cosas que no son reales». Al parecer, los treintañeros que 
interpretan a adolescentes fuman porros en la pantalla hasta volver a casa con las pupilas dilatadas, como pero como explica de mis vecinas “









Mi madre dice que el otro día en la reunión de imserso votaron para mandar una carta a telecinco pidiendo que los jóvenes de las series dieran ejemplo y se reúnieran por la noche para comentar los últimos libros que han leído o que se queden en sus casas haciendo fiestas de pijamas, como dijo mi vecina Loli: “Mi hija siempre pasa las noches de los sábados en casa de una amiga viendo películas, hasta se deja allí la ropa interior para no cargar con tanto peso en la mochila.



“Lo de antes si eran fiestas...y a las 21 en casa" rezan nuestros padres y abuelos. Dulce el sabor el de la “ingenuidad" de algunos padres y abuelos, puro cinismo es lo que se denuncia, acaso no recuerdan lo que llamaban guateques, o fiestas en los pueblos, o el pajar, la casa de la prima, la casa de la abuela, aquellas romerias, nadie fumaba porros, ni tomaban alcohol.... lo que pasa es que con la castaña se les olvida...aix...pero como nosotros, echan la vista atrás y recuerdan...aquello si eran tiempos!!!




Ahora la moda se ha trasladado a los más pequeños. Niños que todavía van a preescolar miran a su alrededor con asco, afirmando que, en sus tiempos, sí que se vivía bien. «Los pañales sí que eran pañales» afirmó un iracundo Jonathan Pérez, líder en su guardería del «movimiento en favor del año 2006» y habitual consumidor de plastilina. «Los capítulos de Pocoyó eran mucho mejores, y los potitos sí que eran comida, y no esa porquería sólida que nos dan ahora»

Si la tendencia sigue, no será extraño ver a bebés recién nacidos 
quejándose de que en la placenta sí que estaban bien, y de que en sus tiempos todo era comodidad y no se pasaban el día llorando.

Lo que no me extraña es que echen de menos cuando las tetas eran tetas y no tenían sabor a plástico rancio.

Que bello es vivir? EN NUESTRO PASADO.

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